El límite (YO)

En la vida TODO tiene un LÍMITE... Porque en la VIDA no podemos tenerlo TODO por más que nos esforcemos... Les recomiendo que vean, lean y escuchen al Licenciado Gabriel Rolón.

Hace tres días yo puse un límite, algo que siempre me costó poner, motivo por lo cual mi psicoanalista está orgullosa después de seis meses de analizarme... 

Es que una cuando ama, tampoco puede permitir TODO. Yo lo intenté, no me pueden decir que no, perdoné lo que muchos no hubiera perdonado y volví a darle una oportunidad a la persona que hasta hoy considero el amor de mi vida. Oportunidad que no quiso aprovechar... porque ya no siente lo mismo, porque ya no me ama. 

Yo quería que ELLA me ame como yo quiero (o necesito), que quiera saber de mí todos los días, que me diga buenos días, buenas noches, que se preocupe por si dormí bien o si me fue bien en el trabajo (o en el resto de mis actividades), quería que deseara verme seguido, que cuando nos viéramos no se pudiera contener las ganar de besarme, tocarme y de hacerme el amor. Pero eso no pasó... porque ya no le nace todo eso al verme, y no saben lo que duele ser consciente de esto. 

Ella me extrañaba si, pero solamente quería tenerme en SU vida como una amiga más, y eso a mi no me hacía bien, yo a una amiga no le doy besos en la boca, ni le hago mimos cuando la tengo al lado, ni deseo tenerla en mi cama para dormir cucharita...

Yo quiero ser parte de su vida, quiero saber que está bien y saliendo adelante, más que nada ahora cuando nuestro país está pasando una gran crisis (otra vez), pero no la quiero como amiga, la quiero como compañera de vida, para compartir el día a día, lo cual no significaba tener que volver a convivir, eso no hacía falta, uno puede estar bien en pareja sin convivir, aunque no puedo mentir, extraño la convivencia con ella. 

Pero no me puedo conformar con solo verla una vez por semana, con solo hablar entre 15 y 30 minutos al día por whatsapp, esperar que se acuerde de mi para escribirme, o lo que duele estar 24 horas sin siquiera un mensaje de su parte. 

Hace más de un mes nos volvimos a encontrar, después de muchos meses de no vernos a solas, cara a cara, para hablar de lo que nos pasaba. Fue ELLA la que me dijo de juntarnos para hablar en persona. Hoy no dejo de preguntarme qué mierda quería lograr con ese encuentro, yo sé por qué accedí a verla, pero no logro saber si ella solo quería confirmar que yo seguía enamorada de ella, que me seguía teniendo ahí o qué. Es una de las cosas que no deja de darme vueltas en la cabeza. Porque yo sé muy bien que no se juega con los sentimientos de la gente, no puedo creer que ella jugó con los míos. 

Volver a verla, tenerla a centímetros me hizo dar cuenta que todo el amor que sentía, que intente olvidar/superar en todos estos meses de soledad y terapia, no se habían ido, ahí seguían... Solo yo sé lo difíciles que fueron todos los días estos meses y lo que van a ser los próximos después de esta recaída. 

Fue bastante raro volver a vernos a solas, tenerla a centímetros, no se los voy a negar, pero me pude controlar, por un par de horas... hasta que no me pude controlar más y tenía que saber que se sentía volverla a besar... volverla a tocar... y todo estaba ahí, los sentimientos volvieron a encender la esperanza de que no todo estaba perdido, pero eso me pasaba solamente a MÍ, a ELLA no le pasaba lo mismo. 

ELLA me hizo una oferta que yo en un principio rechacé rotundamente, pero que luego terminé aceptando pensando en "Por qué no intentarlo de esta manera? No siempre las cosas tienen que ser solo como yo quiero". Y lo intenté, por un mes lo intente, pero NUNCA me sentí cómoda en este papel, ni en la situación en sí. Lo intenté hasta que tuve que decir BASTA, poner un límite. 

Nos volvimos a ver después de una semana sin vernos, pero todo fue raro, ya venía siendo raro desde los últimos encuentros, y nos pusimos a hablar de eso mismo. De que ambas nos sentíamos raras en esa situación. Yo volví a plantar mi deseo de querer volver a intentarlo como pareja, ella me volvió a decir que no quiere estar en pareja con nadie, que no quiere dar explicaciones ni que nadie la controle, quiere ser LIBRE. 

Después de varias horas de hablar, llorar, abrazarnos, pero hablar más de lo mismo, de saber que ambas estamos en sintonías diferentes, que queremos HOY cosas diferentes para nuestra vida me cansé y le pedí que se fuera de mi casa. La acompañé hasta la parada y esperé a que se tomará el colectivo, porque por más dolida que este no voy a dejar que le pase nada si puedo evitarlo. Y ahí en esa parada de colectivo saque valor de no sé donde y decidí ponerle el límite... 

Le pedí que no vuelva a escribirme para saber cómo estoy, yo voy a estar bien, estoy trabajando junto a varias profesionales para estarlo cuanto antes... Yo no quiero ni puedo ser su amiga, no puedo ser amiga de la persona que amo y con la cual quiero compartir mi vida, pero si ella no quiere compartir su vida conmigo como pareja, que al menos no me frene en el duelo que tengo que hacer para poder darme la oportunidad de conocer a otras personas y así encontrar a una chica que si quiera compartir su vida, compartir mi vida... 

Creo que no pido mucho, solo pido alguien que quiera saber de mi día a día, que quiera compartir charlas, momentos, viajes, desayunos en la cama, meriendas en el balcón, cenas, salidas, cines, teatros, fiacas los días feos (nublados o de lluvia), fines de semana, pasar las fiestas en familia, compartir la vida en sí y ayudarnos a cumplir nuestros sueños... 

Duele, duele un montón que la persona que amas, con la que te imaginas compartir todo lo mencionado en el párrafo anterior y MÁS... no quiera lo mismo que vos, no podemos tener todo lo que queremos en la vida, por eso la vida misma nos pone un límite y es un "ESTO NO LO VAS A TENER" (al menos no con ELLA), pero si ELLA sigue apareciendo en mi vida cada tanto, sin saber lo que realmente quiere, porque no sé si sabe lo que quiere, solo sé que NO QUIERE ESTAR EN PAREJA... y eso no lo puedo cambiar, haga lo que haga ella no va a cambiar de idea y yo no voy a resignar lo que SI QUIERO por solo tener momentos fugaces con ella. 

Mi límite fue ese martes, donde no pude relegarme más, donde con todo el dolor del mundo le tuve que decir a quien AMO que no me busque más... que sea todo lo LIBRE que quiere ser, pero que no me confunda más... porque la vida es una sola y lo que menos nos sobra es TIEMPO... 

Como los adictos, yo tuve una recaída. No voy a mentir, quiero saber de ella, quiero que ella sea mi compañera de vida (creo que ya lo dije varias veces), hoy ya la extraño, me encantaría que estuviéramos en la misma sintonía y que trabajáramos JUNTAS para que la relación funcione, pero HOY esto no va a ser, porque CUANDO UNO NO QUIERE, DOS NO PUEDEN...  

Escrito por Flavia A. Moar en Diciembre 2023

Otras pieles (YO)

Pasó el tiempo, y si bien los sentimientos no se fueron del todo, siento que es hora de volver a intentarlo. De estar con otras personas para sacarme poco a poco de mi mente los recuerdos de ella, de su voz, su piel, sus lunares, su respiración, etc. Tengo muy presente que nunca la voy a olvidar, solo voy a superarla, dejar de pensarla día a día, en cada detalle vivido y todos los que nos quedaron por vivir, algún día, espero que pronto. 

Ya hablé de la relatividad del tiempo en otros escritos, si es mucho o poco desde la última vez que la pude tocar, que la pude besar, no sé. Sé que la extraño y que no voy a encontrar a nadie como ella, porque ELLA hay solo una, ella es única, como cada mujer. 

Hace aproximadamente un mes decidí volver a bajarme esas aplicaciones para citas, esas aplicaciones que me hicieron conocerla justamente unos años atrás, si bien ya nos habíamos cruzado varias veces en la vida, nunca habíamos hablado, nunca me hubiera animado a encararla para salir a tomar algo si no fuera a través de una app. 

Hoy estoy acá, tirando corazones y equis/cruces según las fotos, analizando todo como si fuera un catalogo de supermercado. Al final lo primero que nos entra, que nos atrae de otra persona, lo hace por los ojos, la primer estimulación es puramente visual, luego pasamos a la estimulación/atracción escrita o verbal.

Mis amigas me dicen que "volví al mercado", y que feo suena eso, pero es verdad, me hubiera gustado seguir en mi estabilidad emocional, pero ya no era tan estable como pensaba, y la rutina me iba a terminar aburriendo tarde o temprano. 

Ya he tenido varios match, pero me había olvidado lo decepcionante que era hablar y que nunca te responsan, o que la charla fluya bien, hasta que de la nada, dejan de responder, el remar una charla. El típico "A qué te dedicas?", "De dónde sos?", "Tu comida preferida?", el volver a conocer a alguien aunque no sea para nada serio, hoy no estoy en condiciones de conocer realmente a alguien con todo lo que emocionalmente implica. 

Volví a las aplicaciones más que nada por una necesidad biológica que sola no estaba pudiendo satisfacer... Como darme la oportunidad de compartir algo que es tan íntimo, como el estar piel con piel con otra mujer, después de tanto tiempo... De darme la oportunidad de volverme a conocer a mi misma, porque cambié, no soy la misma que hace 5 años ni la misma que hace 5 meses atrás... Hay cosas que ya no me gustan como antes y hay otras que antes no me gustaban y ahora sí las deseo. 

Al menos a mi se me hace difícil esto de las primeras veces (desde una primera entrevista laboral, ni hablar de una primera cita con alguien que podes llegar a intimar, de solo pensarlo ya empiezo a transpirar), pero ahí vamos, con miedo como la mayoría, pero paso a paso, día a día, hablando, conociendo personas nuevas tanto en lo virtual como en persona.

Un día llego la primer cita, fui con más nervios que esperanzas, pero dispuesta a intentar escuchar más que hablar, y fue difícil no comparar cada detalle, desde la puntualidad, hasta los gestos al hablar, o el "pelear" para ver quien de las dos paga la cuenta. Fueron dos horas, no fue tan mal, aunque sé que en unos años probablemente me olvide de esa cita y de esa chica, fue el primer paso para muchos otros que le siguieron. No hubo ni un beso, tampoco era necesario. 

Y llegó la segunda cita, ésta vez con una persona totalmente diferente a la primera, una cena fue el motivo del encuentro, otra charla amena sin sobre saltos. Otra vez terminó sin un beso si quiera, pero buena onda desde el primer minuto. Quizás de tantas personas que conozco en las aplicaciones pueda conseguir alguna que otra nueva amiga, por qué no. 

Con ambas quedó abierta la posibilidad de un segundo encuentro, solo restaba poner fecha y lugar. Decidí darle prioridad a una en especial, porque sentí que era lo correcto, me nació así. Nos vimos, y al principio solo hubo un tímido beso que pude robar, pensando en que la otra persona estaba más nerviosa que yo, decidí esperar, fuimos a cenar y al volver a su casa, pasó lo que fui a buscar que pasará, por momentos siento que la usé y me siento culpable, pero las cosas las dejé claras desde la primera charla: "Me separé hace poco y no quiero nada serio". 

Se podría decir que ya no soy novata en esto de estar con una mujer, pero si con esa mujer, cada mujer es especial, única, no son básicas como los hombres. Y volver a estar con alguien nuevo no es como "andar en bicicleta", es empezar a explorar de a poco, qué le gusta, ver y sentir sus movimientos, si se le eriza la piel o no con ciertos gestos y acciones de mi parte. Preguntar, siempre es importante preguntar que quiere la otra persona, adivina nunca fui y la intuición puede fallar. 

Otra persona, otra piel, otro olor, otros lunares, otras sensaciones y en medio mi cabeza llevándome al pasado a cada instante, queriendo boicotearme para que no disfrute el momento. Hice mi mejor esfuerzo por bloquear cada recuerdo gravado a fuego, y le terminé ganando a mi pasado, aunque debo reconocer que no fue mi mejor performance, tuve que pedirle perdón a esta chica que nada tenía que ver con mi mambo, aunque no había nada que perdonar, porque ella no la pasó para nada mal, o disimuló muy bien. 

Soy de las que piensa que si en el primer encuentro no hay mucha química nos merecemos una segunda oportunidad, más que nada por los nervios típicos de la primera vez. En este caso no me dieron una segunda oportunidad. También sé muy bien que las cosas no hay que forzarlas, si no va, no va... Igual fue importante en todo este proceso, porque fue LA PRIMERA DESPUÉS DE... 

Y apareció una tercer chica, una tercer primera cita después de mi separación, pero ella tenía algo que las otras dos no tenían, de entrada me cautivo desde la charla, no sé cómo pegamos una confianza que no buscamos, pero se dio. Todo claro desde el día uno, ambas separadas hace poco, solo buscamos pasarla bien sin tanto drama, sin complicaciones, y hasta la posibilidad de cumplir fantasías pendientes. 

Fueron dos semanas de un chat muy intenso y subido de tono. El encuentro no se daba por temas de fuerza mayor, como un "No puedo, juega Huracán". Hasta que tuvimos un día y horario agendado, pero las ganas eran muchas, el destino quiso que yo estuviera cerca, así que dos días antes de la primera cita adelantamos el tan esperado cara a cara, sin ir a comer, ni a tomar nada, fue solo una hora, en la puerta de su casa, en mi auto, donde solo nos besamos apenas nos vimos, y no pudimos parar. Pudo haber pasado de todo, pero decidí esperar. Total qué son 48 hs más? Fueron 48 hs eternas, en el medio un viaje a Rosario para ver a Huracán, donde para colmo perdimos dando lastima, pero eso no viene al caso. 

Pasaron esos dos días y nos volvimos a ver, tal cual lo habíamos planeado desde un principio, en su casa, ya que prefiero jugar de visitante las primeras veces. No hubo ni un: "Hola, ¿Cómo estás? ¿Queres tomar algo?", el encuentro previo había dejado todo más que claro. Había despertado una necesidad en mí que ya ni me acordaba que podía tener, sentir tanto deseo por algo, por alguien. Los besos habían dejado mucho a la imaginación y no me gusta quedarme con las dudas de nada, esto no era algo que se podía googlear, había que tirarse a la pileta y volver a jugar. 

Todo se fue dando como si no fuera la primera vez que estábamos juntas, ésta vez si fue como volver a andar en bicicleta después de un largo tiempo. Había algunas cosas que ya las habíamos hablado previamente, y al tener buena memoria no fue impedimento llevarlo a cabo en aquel primer encuentro. Pero por más de que se hable mucho, la piel no se consigue solamente hablando, se tiene o no se tiene. El tiempo voló, y pude desconectar mi cabeza, mis pensamientos como quise. No voy a contar detalles, no da, solo voy a contarles que volví a sentirme deseada y deseante. Volví a sentir que por un momento para la otra persona solo importaba satisfacernos mutuamente, volví a sentir esa felicidad momentánea y plena. 

Ya pasaron unos cuantos días, y otra vez no podemos coordinar un nuevo momento a solas, ya se dará, espero que pronto, pero el recuerdo de aquel sábado por la noche no se va de mi mente, de mis manos, de mis labios. Cierro mis ojos y la veo, la siento, y sé que a ella le pasa lo mismo. Yo y mi buena memoria visual, recorro sus curvas en mi mente, recuerdo lo que pasó y pienso lo que puede llegar a pasar. La comparación es inevitable, siempre va a estar, pero ella es otra, y con ella también hay piel, me hizo dar cuenta que no tenemos piel solo con una persona una vez en nuestra vida, que la vida es hoy y que yo quiero vivir, quiero sentir. 

Sé muy bien que esta relación tiene fecha de caducidad, ninguna quiere nada serio por el momento, pero espero que podamos divertirnos, disfrutarnos por una buena temporada, porque a pesar de todo, aún no fue suficiente y quedaron muchas cosas pendientes. 

Escrito por Flavia A. Moar en Octubre de 2023

Sus abrazos (YO)

Quienes me conocen saben que no soy muy demostrativa, ni con las palabras ni con los gestos. No soy de dar abrazos casi nunca y quienes conocen a mi familia entienden el "por qué"...

Pero hace unos años conocí los abrazos más lindos, desde el primero sentí que llegué al lugar donde siempre quise llegar, lo que siempre busqué, a ese lugar donde no te importa nada más, donde sentís una paz y tranquilidad que te llenan el alma y todo el cuerpo. 

Los abrazos no son para cualquiera, de hecho una de las mejores cosas que nos dejó la pandemia para mí es el saludo con puñito, ya que ni un beso en el cachete para mi es para todos los que se me cruzan. Hay quienes me tildan de arisca por esto, pero si me llegan a conocer entenderán el por qué. 

Hoy volví a verla, solo unos minutos, pero cuando nos despedimos volvimos a abrazarnos y fue hermoso, fueron los segundos más lindos de mi día y no sé si de toda la semana... Ya llevaba más de una semana sin verla ni abrazarla, aunque hace más de dos meses que no es lo mismo porque ya no somos nada, y amigas no podemos ser... al menos no ahora. 

Justo hoy que era el día 7 del mes... Era el tercer 7 que no nos saludamos por nuestro cumple mes, y me pregunto si ella ya le habrá restado valor a ésta fecha... 

Es cerrar los ojos y volver a sentir su cuerpo pegado al mío... Nuestros latidos yendo al mismo ritmo. Sentir su calor, su aliento, su piel aunque nos separen varias capas de ropa.

Una de las cosas que más extraño, además de sus besos, son sus abrazos diarios, y el dormir en sus brazos. y el que ella duerma en mis brazos. Nunca en toda mi vida me había pasado de sentir esa conexión con alguien, y ni siquiera sé explicar muy bien todo lo que siento, podría decir que es magia, si es que la magia existe. 

La psicoanalista que me trata (que tiene trabajo para muchos años conmigo) me dice que esos abrazos me deben hacer acordar a algunos abrazos de mi infancia, o son los abrazos que tanto me faltaron en la infancia. La verdad es que por ahora no puedo acordarme, quizás sea que me recuerde a los abrazos y al amor de mi abuela, no lo sé con certeza. 

Lo único que me importa ahora es que ella sea feliz, que esté tranquila como hace tiempo no podía estarlo a mi lado. Duele que ya no sea feliz a mi lado, duele pensar que cada vez esos abrazos sean más distanciados y que duren menos tiempo. Duele pensar que algún día no haya más de estos abrazos. 

Si los tengo que describir, no son de esos abrazos DE OSO (esos serían los míos), pero son unos abrazos tiernos llenos de amor, no sé si el de hoy tenía amor de su parte, me encantaría que sí, porque eso significaría que aún hay esperanzas, quizás me sigo ilusionando solo por ser una persona romántica. 

El otro día me preguntaron si sentía que ella era el amor de mi vida, de mi vida hasta HOY, sin dudas, fue el amor más lindo y puro en mis 35 años, con sus detalles, porque nadie ni nada es perfecto, pero la volvería a elegir, para que me acompañe mientras enfrento mis miedos, mientras sano mi historia, mientras trabajo mis defectos para intentar ser una mejor persona. 

Yo que no era de abrazar hoy necesito abrazos diarios, me encantaría que fueran de ella todos los días, pero ella ya no es parte de mi vida... No se dan una idea de lo mucho que necesito sus abrazos... 

Si algún día lee esto quiero que sepa que sus abrazos eran mi lugar preferido en el mundo, ni hablar de aquellos que fueron gritando un gol contra los cuervos... 

Gracias por enseñarme que abrazarnos también era hacer el amor... 





Escrito por Flavia A. Moar en Agosto de 2023

La casa vacía (YO)

Y llegó el día, el día que nunca quise que llegué, el día que se fue definitivamente de casa, el día en que se llevó todas sus cosas...

La ayude lo que más pude a que pudiera volver a empezar de cero, como se lo prometí antes de que decidiera dejar todo y mudarse conmigo. Evite lo más posible volver a casa después de que se fuera con parte de mi vida adentro de un camión de mudanza, y no hablo de cosas materiales. 

Volver, abrir la puerta principal y no ver todas sus cosas (muebles, cajas, bolsas, etc), y saber que no va a volver a vivir en este departamento, ni ella ni el gato, fue doloroso, fue sentir que perdí una parte de mi, un vacío que nadie más va a poder llenar, porque en la vida todas las personas que nos dejan se llevan algo de nosotros y no tenemos que buscar llenar ese espacio con otra persona, ya que nadie va a reemplazar a los que hoy no están en nuestra vida. 

No solo es el hueco que dejaron sus muebles, como ser la heladera en la cocina... Es el vacío en el placard y los cajones, es que falte su perfume en el baño y su aroma en toda la casa, pero donde más duele es su falta en la cama cada noche. 

No pienso llenar los espacios vacíos con otros muebles, no porque espere que algún día vuelva, me encantaría, pero sé que al menos a este lugar no va a volver.

Extraño encontrar pelitos de Rufino por la casa, por mi ropa, extraño su ronroneo y su insistencia al momento de cocinar algo de pollo. 

Ni la casa es la misma, ni yo soy la misma... Antes apenas llegaba al departamento prendía la tele, no para mirar nada en especial, sino para que no haya silencio en estás cuatro paredes. Hoy ya casi ni miro tele, solo alguna serie antes de ir a dormir. Intento estar más en silencio para escuchar mis pensamientos y entender mis sentimientos, no es fácil, muchos de estos asustan. 

Intento mantener todo ordenado día a día, quizás ahora lo puedo hacer porque entre los días de homeoffice estoy más tiempo acá encerrada, no es fácil ser ordenada en todo sentido. 

Algunos espacios vacíos los voy llenando con libros, como ser mis espacios temporales, leo para intentar dejar de pensarla, de pensar en todo lo que vivimos y en lo que nos quedaba por vivir. 

Con el tiempo se irán los fantasmas que solo habitan en mi mente trayendo recuerdos de unos años hermosos conviviendo con ella, obviamente que no todos los días fuimos felices, hubo peleas como hay en todas las parejas, pero esas no me van a opacar lo feliz que fui viviendo con ella... 

Le agradezco todo el amor y los buenos momentos que me dio y me duele pensar que quizás no se lo agradecí lo suficiente cuando aún era parte de mi vida. 

  Escrito por Flavia A. Moar en Julio de 2023

Un tiempo (YO)

Acá estoy de nuevo, paso un tiempo desde mi último escrito... pero ¿Cuánto es UN TIEMPO? ¿Qué es UN TIEMPO? ¿Una semana? ¿Un mes? ¿Dos o tres meses? En este caso, pasó casi un mes sin escribir, pero no porque no estuviera pensando en nada que escribir, sino que estoy en un proceso de procesar tantas cosas que estuvieron pasando, intentando sanar cosas recientes, pero me di cuenta que también necesito sanar cosas que pasaron hace mucho tiempo... 

Hace dos meses, una persona me pidió UN TIEMPO... y yo sin creer en esto de los tiempos, se lo "dí"... Aunque para mi jugar con el tiempo de la gente no está bueno, ya que nadie sabe cuánto tiempo le queda en este mundo y por eso hay que aprovechar el día a día, disfrutar el hoy aunque nos cueste tanto porque muchos estamos pensando que no llegamos a fin de mes siquiera (monetariamente sobre todo). 

Pero yo soy una persona que hace tiempo vive más en el futuro que en el presente, pienso más en todo lo que tengo y quiero hacer que en disfrutar los pequeños momentos y las personas que tengo a mi lado ahora... trastorno de ansiedad se llama. 

La sociedad, el mundo actual nos lleva a vivir "acelerados", no soportamos que el celular tarde más de un segundo en abrir un aplicación, una foto, vídeo, o un mensaje de whatsapp... Cada día somos más personas las que sufrimos de ansiedad, quizás por culpa del mundo acelerado en el que vivimos... 

Y yo sufro esa ansiedad, de no poder esperar los tiempos que el universo tiene planeados para mi, quiero todo YA, pero no todo va a ser como yo lo espero, por eso tengo que esperar... y ver que pasará... de hecho en estos dos meses estoy entendiendo un poco esto de UN TIEMPO... 

En este tiempo empecé a reencontrarme conmigo misma, revise cosas que hice o dije en el pasado inmediato y hace años... y me di cuenta que hay muchos aspectos de mi persona que no me gustan ni a mí, que quiero cambiar, pero para eso necesito ayuda extra (terapias) y UN TIEMPO, ojalá el proceso sea rápido, pero la verdad que puede llevar hasta años trabajar todos estos temas. 

Hoy después de UN TIEMPO, dos meses, mi ex pareja se llevó casi todas sus cosas de mi casa, si bien la casa no quedó vacía, yo sí, porque hace UN TIEMPO que me di cuenta que lo material es lo que menos me importa, que si bien nunca vamos a ser personas enteras, ella me completaba casi al 99.99%. 

En este tiempo que pasó me doy cuenta que la extraño como el primer día, cuando la tengo al lado me vienen unas tremendas ganas de abrazarla y cuando por fin nos abrazamos siento algo que no sentí con nadie más, una paz y tranquilidad de que todo va a estar bien, de que puede pasarnos cualquier cosa, pero que juntas podemos con todo, pero no, ya no estamos juntas y tengo que enfrentarme al mundo y a mis miedos yo sola... 

Sé que superar a una persona, que quizás sea el amor de tu vida, lleva tiempo, pero cuánto tiempo??? Cuántas noches de mal sueño me quedan por pasar??? Cuántas veces más voy a tener que llorar por extrañarla??? Cuántas uñas más voy a tener que romper con tal de no escribir con cualquier excusa solo para saber si está bien??? Cuántas canciones más voy a tener que pasar sin poder escuchar porque hoy me hacen mal??? 

En este tiempo hice muchas cosas que quizás otras personas no hubieran hecho, pero todas las hice porque así lo sentí, me salieron de adentro, y no se trata de tener poco amor propio, se trata de amar a otra persona a pesar de todo, y por ese mismo amor desearle lo mejor, ayudarla en todo lo que este a tu alcance. El universo ya se encargará de devolverme todo lo bueno que hice... 

¿Saben lo que duele mirar a la persona que AMAS y decirle "te quiero mucho" porque sabes que la otra persona ya no te ama? Es horrible dejar ir a la persona con la cual imaginaste pasar tantas cosas, y quedarte con la sensación de que aún había mucho más por compartir, que una parte de vos piense y sienta que la otra persona aún siente mucho por vos y que no se anima a jugársela, vaya uno a saber por qué. 

En este tiempo me dedique a varias terapias holísticas y fui encontrando algunas explicaciones en mi pasado (ya sea en otras de mis vidas o en mis antepasados), todos tenemos muchas cosas que resolver, primero tenemos que sanar nosotros para después poder proyectar una pareja sana, y no es para nada fácil... es trabajo y tiempo... tengo mucho trabajo por delante y por más que me muera de ganas de volver a estar con ELLA, hoy no le puedo hacer bien ni a ELLA ni a nadie.  

Con el TIEMPO sabré si era el amor de mi vida o solo un gran amor (de esto no tengo dudas) que paso por mi vida para hacerme abrir los ojos de que estaba viviendo más en el futuro que en el presente, quizás en un tiempo vuelva a caminar a su lado, ahí si disfrutando las cosas simples de la vida... 

Quizás en UN TIEMPO nuestros caminos se vuelvan a cruzar, siendo dos personas distintas, que tengamos que volver a conocernos y empezar de cero... quizás no y si eso no ocurre recordaré con una sonrisa estos cuatro años hermosos que viví a su lado... 

Ojalá (YO)

Ya me estoy haciendo a la idea de que nunca la volveré a ver, salvo para resolver las cosas en común que nos quedaron, pero no vernos como a mi me gustaría. No tenemos amigos ni actividades en común, no frecuentamos los mismos lugares, ya no formamos parte de nuestras vidas...

Pero OJALÁ que conozca a alguien que la ame más que yo, alguien que le recuerde que le quedan hermosos los rulitos naturales y que también le queda bien cuando se hace la planchita/alisado... o cuando apenas se levanta con toda la cabellera enredada. Que nunca nadie la haga dudar de su hermosura, sin importar que peinado tenga. 

Ojalá la hagan sonreír más que yo, ya que cuando sonríe ilumina toda la habitación donde este y contagia su buena energía. Nunca me voy a olvidar de esa sonrisa que me conquistó... 

Ojalá encuentre a alguien que le demuestre lo valiosa que es, que la ayude a conseguir todos sus sueños, y que no deje que nadie le machaque el autoestima ni la haga sentir menos. 

Ojalá que algún día se de cuenta que es una de las mejores maestras, ojalá algún día reconozcan todo el trabajo que hace dentro y fuera del aula, que reconozcan las horas que pasa trabajando en su casa también.

Ojalá que encuentre a su bolsita de agua caliente de carne y hueso para los inviernos y que esa misma persona no la acorrale y la deje dormir tranquila en los días calurosos. 

Ojalá encuentre otro pecho donde pueda descansar tranquilamente mientras esa persona le hace muchos mimos aún sabiendo que ya se durmió. 

Ojalá aparezca en su vida esa persona que realmente la escuche cuando este mal y necesite hablar, y cuando este bien y quiera compartirlo también, algo que yo no pude hacer como ella necesitaba, no fue adrede, solo fue uno más de mis defectos como persona y como pareja.

Ojalá cuando escuche nuestras canciones, esas que nos dedicamos por amor, se le ilumine el rostro, porque no todo fue malo, tuvimos momentos hermosos, muchos por suerte. 

Ojalá siga conociendo nuevos sabores, porque nunca conocí a nadie que se emocionara tanto por disfrutar una comida deliciosa, y a mi me gustaba estar a su lado mientras la veía disfrutar esos momentos. Pero que no solo la acompañe a restaurantes caros, ya que en los bodegones y en la costanera también se come muy bien. 

Ojalá encuentre a esa persona con quien disfrutar los recitales, desde la primera hasta la última canción por más que no la conozcan ninguna de las dos, simplemente disfrutar el show, que la música llena el alma.

Ojalá que encuentre alguien que disfrute tanto las siestas los fines de semana como ella, que la acompañe recostada a su lado. 

Ojalá conozca a alguien que quiera casarse como ella tanto lo deseaba. 

Ojalá su próxima pareja quiera y cuide mucho a Rufino como lo hice yo, a pesar de que no me gustaron nunca los gastos, él también se hizo querer.

Ojalá su nueva persona especial se lleve bien con su familia, especialmente que trate bien a sus sobrinas.  

Ojalá que encuentre a alguien con quién disfrutar las diferentes fases de la luna, sobre todo las noches de luna llena. 

Ojalá conozca a alguien con quién disfrutar al aire libre en aquellas tardes y noches de primavera y verano.

Ojalá encuentre con quién disfrutar de los domingos de lluvia y fiaca...

Ojalá conozca a alguien que le haga el aguante en las épocas críticas de su trabajo, como ser fin de año escolar, y que la ayude todo lo que pueda. 

Ojalá pueda perdonar todos mis errores y equivocaciones en nuestra relación, espero que entienda a su debido momento que todo lo hice por amor, que nunca fue mi intensión hacerle ningún mal, todos somos humanos y cometemos errores.  

Ojalá pueda cumplir todos sus sueños, porque quiero que sea feliz, a pesar del daño que me hizo quiero que sea feliz, no le puedo desear al mal a alguien que fue tan importante en mi vida, a alguien que amo tanto. 

Ojalá nunca me olvide, que nunca se olvide de lo nuestro, pero que nos recuerde en los buenos momentos, en esos felices, que me recuerde bien, sin rencor ni dolor... 

Ojalá que sea realmente feliz la mayor parte de lo que le quede de vida... 

Escrito en Julio de 2023 por Flavia A. Moar

Duele (YO)

Pasa el tiempo, pero lo que no pasa es el dolor... increíblemente algo emocional termina doliendo más que un golpe físico... 

Duele no poder dormir de noche porque estoy sola, porque falta su cuerpo al lado mío, porque su olor y respiración junto a mi era lo único que necesitaba para poder dormir bien... 

Duelen los labios con tantos besos acumulados que tienen nombre y apellido, pero que no van a llegar a destino. Duele ese último beso que intente robarle y me corrió la cara diciendo "no quiero que te confundas"... 

Duelen los brazos de abrazarme a mi misma, porque ya no la puedo abrazarla más, duele pensar que no la abracé lo suficiente para que sintiera todo mi amor... 

Duele el no poder compartir con ella muchas cosas del día a día, quizás les parecerá una boludez, pero no es fácil aguantarse las ganas de escribirle... 

Duele el no poder hablarle como quisiera, porque sería seguir ahogándola más de lo que ya hice en este último tiempo. Duele no poder decirle tantas cosas que pienso porque en el fondo sé que no le va a importar todo lo que yo sigo sintiendo (me encantaría eliminar mis sentimientos y sufrir un poco menos)... 

Duele la garganta de tantas cosas que estoy callando...

Duele recordar todas las cosas que hice bien (desde mi punto de vista), pero más duele pensar en todas las cosas que hice mal, porque también me mande mis cagadas, porque nadie es perfecto... 

Duele soñarla, duele tener ganas de estar íntimamente solo con ella, duele porque desde el principio tuve una conexión que no tuve con nadie más... y quizás nunca la vuelva a tener con otra persona... 

Duele saber que hace unos meses dejó de confiar en mi y que yo también perdí parte de la confianza en mí y en ella, que volvieron inseguridades que ya había superado en el pasado... Duelen las dudas... 

Duele pensar tanto, pensar si me piensa, si me extraña, si me sueña, si en algún momento nuestras vidas, nuestros caminos, se volverán a cruzar bien, con otras versiones nuestras, mejores... 

Duele tocarme el dedo anular y no tener nuestro anillo de compromiso, compromiso que nos duró apenas un año... 

Duele saber que ya borro nuestras fotos de las redes, que es una forma de borrar nuestra historia... 

Duele frecuentar sola los lugares donde solíamos ir juntas en estos últimos 4 años. Duele ir a la cancha a la cual voy desde el 2006, pero que desde el 2019 iba bien acompañada, hoy duele volver a ir sola como hace años... 

Duele no poder usar la cocina de mi propia casa porque en cada detalle está ella, ella que cocina tan rico, que me hizo comer mucho mejor, probar cosas que antes ni loca hubiera probado y hoy ni me atrevo a cocinar sin ella... 

Duele preguntarme si habrá leído algo de todo lo que escribí pensando en ella, pensando en su ausencia, pensando en nuestra historia... Duele no poder preguntarle ni siquiera esto... 

Duele agarrar la autopista/ruta con el auto y no tenerla de copiloto, duele tocar el asiento de acompañante vacío y frío...

Duele ver nuestra fotos sabiendo que nunca más actualizaremos nuestros recuerdos...

Duele ver la mayoría de su ropa y de sus cosas aún en nuestra casa, porque ella no quiso volver, pero yo hice todo lo posible para que ella sintiera que ésta también era su casa, y no lo conseguí, quizás podría haber hecho un poco más... Duele pensar que en cualquier momento va a venir a buscar el resto de sus cosas... 

Duele pensar en las vacaciones de invierno donde ya teníamos planeado ir juntas a las termas a relajarnos, tener sesiones de masajes y de spa, algo que nos recontra merecíamos por tanto estrés que estábamos teniendo. Duele pensar que voy a tener que ir sola... o no ir...

Duele saber que todo lo que estoy pasando es por su decisión, por lo cual no puedo hacer nada, porque tendría que haber hecho (o no hecho) tiempo atrás, ahora ya es tarde... 

Duele ir haciéndome a la idea de que los sueños compartidos con ella no los vamos a poder concretar, duele pensar que todo fue un lindo sueño que terminó en pesadilla... 

Duele pensar que en los últimos meses me convertí en una persona que nunca quise, me convertí en una novia tóxica e insegura... Duele pensar que ésta versión de Flavia 2023 pudo hacerle algún tipo de daño a la persona que más amé en lo que va de mi vida... 

Duele pensar que ella ya está en otra, con otra quizás...

Escrito en Junio de 2023 por Flavia A. Moar